En un año, el salario mínimo perdió un 30% de su poder adquisitivo
Un informe de la UBA detalla que el valor real del salario mínimo es inferior al de 2001, antes de la crisis de la convertibilidad.

Aunque en meses posteriores hubo períodos de estabilidad e incluso una leve recuperación, las caídas volvieron a predominar a partir de junio, consolidando un panorama crítico para los trabajadores.
Además, el informe subraya que el salario mínimo actual representa una erosión del 61% en comparación con su valor máximo histórico, registrado en septiembre de 2011. Este desplome no solo afecta a los trabajadores que perciben el salario mínimo, sino que también tiene implicancias más amplias para la economía, dado que este indicador sirve como referencia para numerosos acuerdos salariales y planes sociales.
En contraste, el informe señala un leve repunte en el empleo asalariado formal durante septiembre de este año, con un aumento de 8.800 puestos respecto al mes anterior. Sin embargo, la cantidad de trabajadores formales sigue siendo inferior en 183.000 puestos comparado con noviembre de 2023, lo que refleja la persistente fragilidad del mercado laboral.